y por qué justamente tuvo que ser esta noche cuando los recuerdos se agolparon contra tu puerta, y entraron sin avisar ni preguntar, y te empujaron contra la pared, o contra tiempos mejores, donde todo siempre solía ser tan fácil, asi que es cierto..que realmente los recuerdos te agarraron por el cuello y te miraron a los ojos de frente haciendote ver tu vida desde más arriba, desde afuera, desde otros ojos, y al final no te queda más que tirar el humo del cigarro al aire mientras los recuerdos te muerden el cuello, te apretan fuerte las muñecas, te tiran del pelo, te dejan ahí, en un rincón, como tantas otras veces hasta que te fundes con el humo y el cigarro y el aire.

ver.dades

porque al final, persisten los mismos miedos, y quedó todo tan lejos.. esas noches que nos escondíamos bajo las sábamos esperando que los miedos pasen, esas noches que yo me subía al ring con tus debilidades y tus temores y tú con los míos, y todas las noches igual, todas las noches luchas contra el lado oscuro de esta vida, de tu vida y la mía. Muchas veces los derrotábamos entonces podíamos dormir tranquilos, sabiendo que habíamos ganado una vez más, sabiendo que si estábamos juntos los miedos perdían el significado que tienen y esa cara y esos ojos que nos miraban de frente haciéndonos temer todo el tiempo, pero fuimos ganadores. Y nos dormimos.
Y hoy me desperté y ya no estás, supongo que ni yo misma tengo el valor de subirme a un ring con mis miedos y con estas debilidades de una tarde de lluvia en que todo se moja y se oxida

hace tanto calor,
esto me recuerda que no estás, que odio el verano, que no quedan helados .