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NAVEGAR SOBRE LAS MANOS

viernes, 31 de octubre de 2014

Parte I

podría todavía saber ver tu risa
debajo de todo el cemento
que nos tiraron encima
el eco y la leve línea
de tus labios
finos 
como un hilo inquebrantable
que en otro tiempo me traspasó 
por la boca y la garganta
el amor

podría todavía ver juguetes apilados
sobre el llanto lejano
de la hija que nunca tuvimos


podría todavia adivinar
cual es tu mano
entre miles
entre miles de manos embarradas
de tantos golpes
a la nada
al aire hueco 
que llenaba todo

podría saber por qué calles
extraviadas
está tu voz
la que perdiste hace rato
cuando de repente se convirtió 
en un grito inalcanzable
infinito

todavía podría
ver de lejos
en tus lunares
todos los poemas que te escupí
sobre la piel
aquella noche
en la que ya ni sobrevivir
nos salvaba


es miserable
tu vergüenza 
mirándome así
desde el otro rincón 
de la habitación
mira hacia abajo
suspira
dice
maldice
mira fijo
para aportar ideas erróneas
para autoconvencerse 
de que la miserable soy yo

y no.
habrá que abrir
las ventanas
ponerle alas
y darle un beso hecho ceniza
en la espalda
y que no vuelva 
que no vuelva más

jueves, 30 de octubre de 2014

creíamos ver
pensábamos acaso ver
un rayo de sol a través 
de una persiana a penas
antreabierta
en una habitación
culminante
colmada de plenitud
y deseos envueltos 
en el aire
en las manos
en la espalda,
creíamos acaso
que soñar
no era más
que la ilusión
de los días
en los que te veías
incalculablemente extenuado
y solamente te resignabas a ver
un rayo de luz
por la ventana
acaso
apenas
entreabierta.


martes, 28 de octubre de 2014

No tiene mucho sentido hablarte, hablar de vos como el hueco ruidoso que sos dentro de esta casa, hablar de vos como la nube amorfa o como ola que nunca se rompe, digamos, absurdo hablar de vos con todas esas metáforas que te tranquilizaban y te acercaban al mundo, nunca tuvo sentido, imaginate si va a tenerlo ahora, a estas horas, hablar de vos, pequeño pájaro que vive desesperadamente buscando las alas que perdió cuando volar se volvió caida y recaída, vos que terminás siendo un síncope después de tanta cotidianidad y costumbres herméticas y vacías, qué sentido puede tener explicame, que hable de vos, hablar de vos pero desde mi, con tu boca y tus manos en mí, que son las que escriben en esta máquina pero sólo a través de lo que mis ojos vieron cuando el desorden nos separaba a distancias exorbitantes, pero es tan fácil despertarnos de tanto soñar y tanta noche, de esas que son noches desde hace una semana, y pensar, sobre todo pensar  que en estos momentos estarás volando incurablemente por las tibias hojas de Paul Éluard y seguidamente por Hesse o Jacques Prévert, y que a lo mejor el café se te volcó sobre tus apuntes de cubismo y Marcoussiss y Blanchard, o quizás arrepintiéndote, de tanto en tanto, de haber comprado esa televisión que vive apagada -porque hace rato perdimos la capacidad de ver- esa en la que veíamos películas suecas que nadie conocía, en las que los amantes hacían el amor mientras nosotros comíamos chocolates con ojos apáticos y escépticos, indiferentes a tanto placer y tanto sexo, porque ya estábamos tan lejos de todo, lejos de la órbita que a veces nos acercaba incandescentemente y nos alejaba y nos volvía acercar extintos, haciendo de todo un big bang, una retención y una huida, un choque y una liberación, un escape, una fuga, una excarcelación de lo todo lo que solíamos ser(y qué solíamos ser.)

Cierto, hoy te quedaste sin manos de tantas despedidas y renuncias, y con ese vacío inevitable intentabas coser alguna mínima esperanza de que algún día el amor sea, el amor llegara a ser, el amor te librara y no te condenara como lo hago yo desde aquí, eterna sentenciadora; Porque era verdad que yo fui la que activó el relámpago que desencadenó todo el incendio. Y cómo explicarte, que sé que a veces te mirás los párpados en el espejo que pesan como el cemento bajo la piel, y sólo ves que hay ceniza exenta y frases por tu habitación que reiteradamente desembocan en lo mismo, en la nada, en la carencia, en el sinsentido de escribir para alguien, de que alguien escriba para nosotros, de que las palabras fluyan y naden por un sinfín de días incoherentes  e insensatos, pero vos sabés , de la misma manera que lo se yo, que todo el sinsentido gira en el mismo punto transformándose en una dulce y violenta adherencia, un afinidad, una interminable unión dentro de todo caos.


lunes, 27 de octubre de 2014

mendigar
pedir a gritos y a silencio
amor
esperar sin apuro
amor
de rodillas con los ojos cerrados abiertos
con las manos sangrando o llena de flores
pero mendigar amor

alguien habla
 alguien quiere querer y 
quiere comer las flores de mis manos

no puedo
no quiero
me niego
a amar.

esta
bendita
maldita
impávida
soledad
sin
ojos
boca
nariz
mira
muerde
huele
la constante extenuación
de los días

me contiene.

miércoles, 22 de octubre de 2014

se amontona
la basura
los despojos
los desperdicios
los restos
las sobras
los sedimentos
bajo la piel
explota
duele
rompe

martes, 21 de octubre de 2014

ya no más
no ya nunca más
más no
ya no más
el irrenunciable grito
del abatimiento
matutino
no más
ya no
la renuncia impronunciable
de la exasperada puerta
que se abre
para ir al otro lado
para salir
para ver
para ver si podemos ver
para encontrar
o para no hallar
como es
la costumbre.

no más ya no más
el calor de la soledad asfixiante
los pájaros impasibles
de volar
por calles irrecordables
pesadillas
truenos y sangre
no más
ya nunca más
la exacerbación
en las noches
en las livianas noches
que pesan en la nuca
no más
pensar
no más
peso
aquí
adentro
no


domingo, 12 de octubre de 2014

con un beso por cada vértebra
me despierta
me toca el pelo y me lo enhebra y enreda 
y descose y tira
para hacerme doler 
y que duela 
y que no pare de doler
después por el arrepentimiento insano 
me besa hasta arder
me desnuda y penetra y me hace el amor 
contra un espejo
para aprender a ver
para obligarme a ver(me)

nos enredamos nos laceramos
nos besamos y nos llegamos a amar
un poco
sólo un poco porque ella no sabe 
no quiere 
no aprende

después me hace un café
abre la ventana por dónde entran
viejos y conocidos fantasmas
aturdidos por el resplandor del recuerdo
dolidos por que me atrevo a mirarlos 
y romperlos y desahacerlos
mientras gimo de dolor
y miedo y los ojos
se cierran y se vuelan como las cortinas
como el humo de un cigarro 
que fumaste con el último café
el día que tus ojos eran relámpagos
mientras me decías que la palabra 
nosotros
era demasiado benévola 
para dos diablos como nosotros
que no le correspondíamos


los fantasmas huyen despavoridos
porque no me dejo besar
porque no me dejo tocar
estoy tan sola
pero ella me lee poemas muertos,
muertos irremediablemente 
como ella

y

me agarra la mano con sus fríos dedos
me hace tocar sin miedo
las ruinas de las cosas que ya no existen
-lo infinito nunca va a ser de los humanos-
me dice mientras se ríe y llora fuego

enfin
es ésta
ésta es
mi pobre vida
en la siguiente carta
te cuento la cara que pone 
cuando me abraza tanto que me rompe
los huesos
y se alegra de eso
es tan traviesa
esta soledad
mi amor

hace lo que quiere
ya ves
hace lo que quiere.

De esta lado llueve.
Hasta en la distancia te puedo
ver
dibujar utopías en las paredes
enlazar las mañanas con las noches
para que los días pasen
más rápido
como esos trenes
que llevan la misma gente
con la misma ausencia de vida
en la nuca
en la espalda
en los ojos de todos los
que viajan
en el tiempo
de lo que ya no existe.

Y puedo verte
llorando poesías
sobre las heridas viejas
y las tenues esperanzas
nuevas o renovadas

Y puedo escribirte
desde tus labios
en los que me escondía
cuando afuera no paraba
de llover
o de llorar

Y puedo recordar
el leve tacto de
tus manos
en mi columna
para no caer
de tanta inestabilidad
y me quisiste enseñar
a encontrar y adueñarme
del equilibrio
aunque a veces un libro
se rompía de tanto diluvio
y después se empezaba a recomponer
de a poco
con palabras y comas
porque la vida era eso

renacer y buscarte
dentro del equilibrio
del que ya nada sé
del que nunca supe adueñarme
ni hacerlo parte de mi
como vos hacías
con mi boca y mi sexo

vos que me enseñabas
tanto
y hoy no aprendí nada
porque la lluvia sigue
y de este lado el agua
está por llevarme
tal vez al encuentro
de un equilibrio
inexistente en esta ciudad .



viernes, 10 de octubre de 2014

Hasta los pájaros más inagotables
se incendian de realidad
y se  aniquilan
se devastan
se arrasan
se destruyen
se olvidan
no 
si 
no

lunes, 6 de octubre de 2014

ahora
ahora que
la silueta de tus dedos
inexistentes
me tocan y me hacen vomitar
el frío despiadado que besa tu soledad
al final de cada día
al principio de cada noche

ahora que
tus ojos me miran
desde un lugar
tan lejos
que se vuelve cerca
es decir,
adentro mío,
pero no sangran ese
color verde
que solían lloverse un tiempo atrás


ahora que
tus piernas dejan de caminar
para elevar vuelo
y mirar desde arriba
del techo de mi habitación
los suplicios los gritos
los desgarros de mi nombre
que se rompe y se rehace
para volver a reconocerme.

ahora que
tus pequeños dientes
quieren comerse las putas conciencias
de los creadores de aviones
pero las paredes de los aeropuertos
se están cayendo
mi amor
el tiempo se está deshaciendo
entre tu boca y mi lengua
mordida indefinidamente por esa vejez
que nos llegó anoche
de repente

adentro de tu auto
en donde la lluvia empezaba a entrar
como conmovida por la mierda de escena
patética y triste que estábamos tejiendo
con mocos y lágrimas y las voces
las lúgubres voces que decían

no puedo verte más
no puedo comerme más tus ganas
de querer romper todo el desorden caótico
que reina en mi vida desde los 12
no quiero verte no puedo verte
nos quedamos ciegos hace rato
ebrios de tanta cielo herido
no quiero ser tu vida
tu pobre vida
si vos querés volar y vas a volar
vaya si vas a volar,
en madrid vas a encontrar otros muros que
romper y que arreglar para volver a romper y volver a arreglar
y amar finalmente
- y una canción decía que en otra vida
tal vez
tal vez vamos a encontrarnos mi amor-


y yo quería que la lluvia te inundara
y te dejara sin respiración
porque no te merecías más
que una muerte lenta y dolorosa
y lacerante y lamentable
por ser asi
por decir asi
por ser
por decir
por

glup  glup

sábado, 4 de octubre de 2014

 "¿Qué película te gustaría ver?
¿Qué canción te gustaría oír?
Esta noche no tengo a nadie
    a quien hacerle estas preguntas.

Me escribes desde una ciudad que odias
a las nueve y media de la noche.
cierto, yo estaba bebiendo,
mientras tú oías a Bach y pensabas volar. "








Y porque también era de esa manera, en donde se crecía y decrecía a partes iguales, donde el pasado ya no tenía más manos para agarrarnos los miedos del presente, donde tus ojos ya no tenían la capacidad de amoldarse a mi ansiedad, donde ya no había más agua en esta habitación que pudiera apagar todo ese fuego que salía de tu boca y tus palabras - mojadas y absorbidas inevitablemente por la exasperación que te manejaba y te llevaba siempre hacia el otro lado contrario a mi, siempre a ese otro lado donde te levantás por las mañanas cuando irremediablemente es la noche, pero uno busca el sol sabiendo, sabiendo que por algún lado debe estar aunque todo lo que nos rodea es ausencia y un grito hueco de la oscuridad que nos dice que no, que tal vez algún día, pero hoy no.

Tal vez era cierto que habían llegado a ese inexorable punto en que el amor no era más que un pájaro que volaba - ahora en otra dirección, siempre en otra dirección - y que estaban en esa transición que comenzaba en el inicio del conocimiento de otras manos y otros ojos y otros infiernos donde nos habríamos de perder, donde nos habríamos de perder y de encontrar como en los ojos de antes, los de siempre, los que ya no son nuestros ni los de siempre y que vagan en la nada, que se convierten en ese humo que se mete por los ojos y por la boca haciendo zigzag por adentro, comiéndonos los pulmones y las vértebras, tan parecido a la muerte, a la muerte que con el tiempo nos hace revivir y tal vez poder girarnos y mirar al pasado con el desprecio y la lástima características de los que nos perdemos constantemente y no sabemos hacer otra cosa más que dolernos y revivirnos a través de los días y la piel de las cosas que ya no existen.